Hablamos de la ciencia como un ente al cual no se le puede rechistar. Me recuerda esta situación a aquellas historias sobre la Santa Inquisición.
En fin, la historia nos ha demostrado infinitas veces que la ciencia dogmática (que por desgracia es la que impera en el sistema desde el S XIX) se ha equivocado. Diréis, pero los estudios están para demostrar las cosas. Bien. Eso es cierto, pero no lo es menos que muchos estudios se tiran atrás o directamente no salen a la luz porque a las grandes compañías farmacéuticas NO LES INTERESA LLEVARLOS ADELANTE.
¿cuantas veces habéis leído en prensa desde que tenéis uso de razón de ese estudio revolucionario que ha erradicado el cáncer en ratones? Yo lo llevo leyendo desde los años 90. Sabéis donde acaban todos esos estudios que parecen traer la solución a esa otra gran epidemia? Supongo que en la basura.
Si hubiésemos hecho caso a la ciencia dogmática hoy en día los aviones NO EXISTIRIAN, por ejemplo, o se seguiría pensando que las grasas son las causantes de los infartos.
A la ciencia se le ha de confrontar, sobre todo en estos momentos en donde parece que superponen los intereses económicos que los sanitarios.
Un saludo.
En fin, la historia nos ha demostrado infinitas veces que la ciencia dogmática (que por desgracia es la que impera en el sistema desde el S XIX) se ha equivocado. Diréis, pero los estudios están para demostrar las cosas. Bien. Eso es cierto, pero no lo es menos que muchos estudios se tiran atrás o directamente no salen a la luz porque a las grandes compañías farmacéuticas NO LES INTERESA LLEVARLOS ADELANTE.
¿cuantas veces habéis leído en prensa desde que tenéis uso de razón de ese estudio revolucionario que ha erradicado el cáncer en ratones? Yo lo llevo leyendo desde los años 90. Sabéis donde acaban todos esos estudios que parecen traer la solución a esa otra gran epidemia? Supongo que en la basura.
Si hubiésemos hecho caso a la ciencia dogmática hoy en día los aviones NO EXISTIRIAN, por ejemplo, o se seguiría pensando que las grasas son las causantes de los infartos.
A la ciencia se le ha de confrontar, sobre todo en estos momentos en donde parece que superponen los intereses económicos que los sanitarios.
Un saludo.