jejjejejj....... que miediittoo kriska!!!!
yi veo al gato así y la que me quedo pillada soy yo!!!
jajajaj......
Y como supiste lo de esa presencia, madre mía que mal trago, no??
y como te libraste de ella?? que miedo, por Dios!!!
Un besazo enorme guapísima, me alegro mucho de volver a saludarte por aquí
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Jajaja, ya te digo, @
lightmarywood . La verdad es que sí acojona un poco al principio. Claro que también, por ver las cosas de forma positiva, a veces te das cuenta de que el gato nota "algo" y se pone panza arriba, lo cual quiere decir que es una presencia benéfica o angélica. Y de eso también he vivido.
Pues mira, me di cuenta sumando dos más dos. Primero por el miedo que tenía yo en la casa y el gato. Tres semanas en verano sin entrar ni a beber ni a comer ni a por mimos y, cada vez que lo cogía y lo metía en casa para probar, se le salían los ojos de las órbitas y arañaba la puerta desesperado. Por si fuera poco, me salió un forúnculo gigante por el que tuve que pasar por el hospital y que me tuvo mes y medio haciéndome curas y mechas diarias con una enfermera a domicilio. Y encima, como iba a viajar a casa por vacaciones, había pedido las tarjetas sanitarias europeas hacía no sé cuánto y no me habían llegado.
Dos semanas después la enfermera me dijo un viernes (un poco presionada por mí) que el domingo me permitía irme si al llegar alguien me hacía la cura sin demora, y no solo el sábado recibí las tarjetas sino que, al meter al gato en casa a la fuerza para llevármelo al día siguiente de viaje, vi que ya no tenía miedo. Todo volvió a la normalidad. Claro que me comí el retraso en el viaje, el mes y medio de mechas y la cándida que me pillé por la medicación. ¡Un cuadro!
Yo también me alegro de saludarte, guapa. Espero que lo tuyo evolucione favorablemente
Besotes