Yo estaba en el mostrador de un banco, con la cartilla sobre el mostrador. A mi lado había un hombre desconocido que estaba muy acercado a mí y mirándome atento (su cara aún la recuerdo). Cuando abrí la cartilla mi saldo había disminuido considerablemente, quedando en 43 euros. Me entró una angustia total. Vino un empleado del banco y me llevó por un pasillo a la caja fuerte, no me quería aclarar la situación, era frío. Y me desperté.
Ah, en la realidad yo soy muy hormiguita con el dinero. Si alguien me lo puedo aclarar, gracias.
Ah, en la realidad yo soy muy hormiguita con el dinero. Si alguien me lo puedo aclarar, gracias.