Desde mi perspectiva, el Tarot no dice directamente si te han hecho un trabajo o no, pero puede resolver indirectamente la situación, mostrando si hay gente de tu entorno que esté enviándote energía negativa. Si el Tarot acusa que hay presencia de energía negativa u odiosidad en tu entorno, lo mostrará con cartas relacionadas al aspecto oscuro y sombrío característico de algunos trabajos de magia como Diablo, Luna, 3 de Espadas o cualquier otra carta que acompañada de otras muestre una alteración del entorno energético de la persona que pregunta.
En lo personal creo en los amarres [que también podrían considerarse actos psicomágicos] , pero cumpliendo ciertas condiciones básicas para que funcionen, como que las personas involucradas tengan algún tipo de conexión emocional o deseo mínimo entre sí. Si no existe cierta reciprocidad en el sentimiento es difícil que funcione un amarre ya que estos procedimientos no pueden violar la voluntad de la otra persona en consideración de las reglas y leyes asociadas al libre albedrío que todo ser humano tiene en este plano dimensional. Quién dice que puede doblegar la voluntad del otro en realidad no le doblega sino que aprovecha los puntos débiles en su libre albedrío para introducir energías que pueden hacerle cambiar de parecer.
Finalmente, tanto en amarres como en otro tipo de trabajos denominados incluso como magia negra, la única opción de que estos funcionen es que la persona no esté protegida por un campo de energía enraizado en un ego fuerte y firme. Mientras más débil y baja la autoestima de la persona afectada, más susceptible es a la influencia de energías y trabajos externos. De la misma forma, más susceptible será también a los engaños.
Origen de la información: https://www.facebook.com/AquarianTarot
En lo personal creo en los amarres [que también podrían considerarse actos psicomágicos] , pero cumpliendo ciertas condiciones básicas para que funcionen, como que las personas involucradas tengan algún tipo de conexión emocional o deseo mínimo entre sí. Si no existe cierta reciprocidad en el sentimiento es difícil que funcione un amarre ya que estos procedimientos no pueden violar la voluntad de la otra persona en consideración de las reglas y leyes asociadas al libre albedrío que todo ser humano tiene en este plano dimensional. Quién dice que puede doblegar la voluntad del otro en realidad no le doblega sino que aprovecha los puntos débiles en su libre albedrío para introducir energías que pueden hacerle cambiar de parecer.
Finalmente, tanto en amarres como en otro tipo de trabajos denominados incluso como magia negra, la única opción de que estos funcionen es que la persona no esté protegida por un campo de energía enraizado en un ego fuerte y firme. Mientras más débil y baja la autoestima de la persona afectada, más susceptible es a la influencia de energías y trabajos externos. De la misma forma, más susceptible será también a los engaños.
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