Gracias por dejar entrever que me consideras inteligente, mi "cavalleroso" amigo virtual.
En todo caso, cuando hablaba de carácter no me refería al malentendido "genio" o "mal carácter", sino a una cuestión que tiene que ver más con la autoafirmación.
Todos, hombres y mujeres, nos sentimos intimidados ante alguien que nos parece arrasador, más aún si, ya de entrada, nos llama la atención. No obstante, creo que, por los roles que nos han impuesto culturalmente, el hombre tiende a sentirse mucho más amenazado ante una mujer independiente, segura de sí misma y lista, que una mujer ante un hombre con las mismas características.
Espero, eso sí, que poco a poco la cosa vaya cambiando.
Luego está la imagen que uno pasa y la que los otros reciben, que no siempre tiene que ver con la realidad de lo que la persona es. A mí siempre me han dicho (hombres y mujeres), que nunca se acercarían a mí porque impongo mucho. Y, no obstante, soy un oso amoroso y una mujer de lo más conciliadora y respetuosa. A saber qué ven en mí los demás...
En fin, Cavallero, en todo caso, una pregunta muy interesante para hacerle al tarot y dejarnos de tanta temática personal.
Un besazo, guapo
Smuaks! (es que, citando, no encuentro los emoticonos por ningún lado, jejeje).
Otra cosa, que me olvidé de añadir, es que el éxito es relativo y habría que definirlo. A mí no me parece un éxito per se tener una pareja de mucho tiempo o saltar de pareja en pareja porque a uno le resulte fácil atraer al s*x* opuesto, sepa manejarse a este respecto y no tenga aprensión a las rupturas y los reenamoramientos.
Lo que yo considero un éxito es conectar con una persona a todos los niveles, encajar como un guante, compartir valores, proyecciones, amor, pasión, complicidad, intimidad (de todo tipo), intereses intelectuales, el mismo concepto de lo que es el respeto y la libertad y una cierta debilidad por el alma del otro que lo convierte en único, especial e irresistible (siendo consciente de que no lo es en absoluto ) y hace que el físico pase a un plano secundario. Como leí por ahí el otro día, quien se enamora del alma de una persona sabrá que ha encontrado con quien compartir su vida, mientras que quien se enamora de un cuerpo o de un rostro no encontrará satisfacción ni en todas las mujeres (u hombres) del mundo. Estaba mejor expresado, jajaja, pero bueno, espero que se entienda la idea.
Desafortunadamente, las relaciones interpersonales se han ido convirtiendo ni más ni menos que en otra forma de consumo, cuando no en una demostración de estatus, y poco o nada tienen que ver con lo que yo imagino como un éxito. Abundan, eso sí, las parejas disfuncionales y malsanas, las que están juntas por no quedarse solas o por comodidad, las parejas que se conocen superficialmente a pesar de llevar años juntos... ¡Yo tengo algunos conocidos que ni siquiera saben las inclinaciones políticas de su compañero/a de vida! A algunos les chirriará que hable de política (entendida en el sentido amplio, no en el sentido de si eres del Barça o del Madrid...), pero es que la ideología tiene que ver con los valores, ¡y desconocer los valores de la persona con la que compartes tu vida me parece ya lo más de lo más!
En fin, que este tema daría para toda una disertación.
Ojalá cada cual encuentre la horma de su zapato para vivir en una felicidad adaptada a su concepto de la misma...
En todo caso, cuando hablaba de carácter no me refería al malentendido "genio" o "mal carácter", sino a una cuestión que tiene que ver más con la autoafirmación.
Todos, hombres y mujeres, nos sentimos intimidados ante alguien que nos parece arrasador, más aún si, ya de entrada, nos llama la atención. No obstante, creo que, por los roles que nos han impuesto culturalmente, el hombre tiende a sentirse mucho más amenazado ante una mujer independiente, segura de sí misma y lista, que una mujer ante un hombre con las mismas características.
Espero, eso sí, que poco a poco la cosa vaya cambiando.
Luego está la imagen que uno pasa y la que los otros reciben, que no siempre tiene que ver con la realidad de lo que la persona es. A mí siempre me han dicho (hombres y mujeres), que nunca se acercarían a mí porque impongo mucho. Y, no obstante, soy un oso amoroso y una mujer de lo más conciliadora y respetuosa. A saber qué ven en mí los demás...
En fin, Cavallero, en todo caso, una pregunta muy interesante para hacerle al tarot y dejarnos de tanta temática personal.
Un besazo, guapo
Smuaks! (es que, citando, no encuentro los emoticonos por ningún lado, jejeje).
Otra cosa, que me olvidé de añadir, es que el éxito es relativo y habría que definirlo. A mí no me parece un éxito per se tener una pareja de mucho tiempo o saltar de pareja en pareja porque a uno le resulte fácil atraer al s*x* opuesto, sepa manejarse a este respecto y no tenga aprensión a las rupturas y los reenamoramientos.
Lo que yo considero un éxito es conectar con una persona a todos los niveles, encajar como un guante, compartir valores, proyecciones, amor, pasión, complicidad, intimidad (de todo tipo), intereses intelectuales, el mismo concepto de lo que es el respeto y la libertad y una cierta debilidad por el alma del otro que lo convierte en único, especial e irresistible (siendo consciente de que no lo es en absoluto ) y hace que el físico pase a un plano secundario. Como leí por ahí el otro día, quien se enamora del alma de una persona sabrá que ha encontrado con quien compartir su vida, mientras que quien se enamora de un cuerpo o de un rostro no encontrará satisfacción ni en todas las mujeres (u hombres) del mundo. Estaba mejor expresado, jajaja, pero bueno, espero que se entienda la idea.
Desafortunadamente, las relaciones interpersonales se han ido convirtiendo ni más ni menos que en otra forma de consumo, cuando no en una demostración de estatus, y poco o nada tienen que ver con lo que yo imagino como un éxito. Abundan, eso sí, las parejas disfuncionales y malsanas, las que están juntas por no quedarse solas o por comodidad, las parejas que se conocen superficialmente a pesar de llevar años juntos... ¡Yo tengo algunos conocidos que ni siquiera saben las inclinaciones políticas de su compañero/a de vida! A algunos les chirriará que hable de política (entendida en el sentido amplio, no en el sentido de si eres del Barça o del Madrid...), pero es que la ideología tiene que ver con los valores, ¡y desconocer los valores de la persona con la que compartes tu vida me parece ya lo más de lo más!
En fin, que este tema daría para toda una disertación.
Ojalá cada cual encuentre la horma de su zapato para vivir en una felicidad adaptada a su concepto de la misma...