Sentado cómodamente mirando hacia el Sur, relaja tu cuerpo y tu mente unos instantes. Observa tu respiración, siente que al exhalar, junto con el aire, arrojas al exterior tus tensiones y tus preocupaciones. Al inhalar siente que te llenas de paz y quietud.
Ahora visualiza ante ti el arquetipo del Emperador, en gran tamaño, con tres dimensiones y con sus colores.
Observa atentamente al Emperador, este te mira y te dice que te acerques hacia él. Cuando llegas a su altura, El Emperador se levanta de su trono y te lo cede, junto con su cetro de poder. Te sientas en el trono y asumes las cualidades del Emperador. Trata de sentir el poder que posee cuando domina su reino y de ver las cosas con la amplitud y la nitidez con las que él las ve.
Este es el momento de reflexionar sobre lo que has conseguido en la vida y todo lo que puedes llegar a conseguir. Transcurrido el tiempo que consideres necesario, te levantas del trono y le devuelves el cetro de mando a su dueño. Observas como El Emperador con toda su dignidad, ocupa de nuevo su puesto.
Ahora puedes agregar vídeos que te recuerden a este arquetipo.
Ahora visualiza ante ti el arquetipo del Emperador, en gran tamaño, con tres dimensiones y con sus colores.
Observa atentamente al Emperador, este te mira y te dice que te acerques hacia él. Cuando llegas a su altura, El Emperador se levanta de su trono y te lo cede, junto con su cetro de poder. Te sientas en el trono y asumes las cualidades del Emperador. Trata de sentir el poder que posee cuando domina su reino y de ver las cosas con la amplitud y la nitidez con las que él las ve.
Este es el momento de reflexionar sobre lo que has conseguido en la vida y todo lo que puedes llegar a conseguir. Transcurrido el tiempo que consideres necesario, te levantas del trono y le devuelves el cetro de mando a su dueño. Observas como El Emperador con toda su dignidad, ocupa de nuevo su puesto.
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