El Hombre de Escorpio
No crea que es tan sencillo, ya que siempre hay una lista de mujeres entusiasmadas por él. Algunas por su simpatía, otras por su magnetismo tan especial y las demás, fascinadas por su mirada, su tierno apretón de manos y sus graciosos guiños de complicidad que suelen confundirlas, unas creerán que les cierra el ojo y las otras que ya lo atraparon por su belleza e inteligencia. En realidad, es bastante difícil complacerlo, pero si logra que de verdad se enamore de usted, tendrá a un hombre enamorado y fiel por mucho tiempo, si no es que para toda la vida. Si usted piensa que son celosos, tal vez usted lo sea más, porque no querrá perderlo. Además, la mujer puede cambiarlo por medio del amor y compartiendo con él los mismos ideales.
El Hombre de Sagitario
No le va a costar gran trabajo hacerlo, sobre todo si usted es guapa, tiene bonito cuerpo, se ríe de sus chistes y aguanta sus bromas, que no siempre son agradables. Si puede perdonarle sus gritos cuando se le sube la importancia a la cabeza, si se interesa por lo que a él le gusta y no pone peros para salir a divertirse con él, ya casi lo atrapó. No lo asuste pidiéndole que se case, porque se le desaparecerá por largo tiempo y después tendrá que ir a buscarlo –aunque esto también cuenta a su favor, ya que se creen lo máximo y lo ven muy natural.
Es sumamente tierno, cariñoso, encantador y, como le gusta presumir con usted, la llenará de regalos. Pero por favor no le crea cuando le jure que la amará toda la vida, pues en cuanto usted no lo vea, le lanzará piropos a otra mujer que le guste. Ni modo, la infidelidad la llevan en la sangre. En la carrera de leyes, donde también destacan, se dice que la especialidad en divorcios se hizo particularmente par a los Sagitarios y los Géminis, ya que se casan y descansan varias veces. Por eso no es aconsejable que se casen jóvenes; sus amores no son duraderos, a menos que se encuentren con la mujer ideal, que los trate como príncipes y además de bonitas sean muy inteligentes.
El Sagitario, aunque nazca en la pobreza, siempre encuentra la manera de subir y llegar a ocupar puestos importantes, y si se casa durante esa etapa, se desesperará de que su mujer no evolucione al mismo ritmo que él y a los pocos años ya se convirtieron en perfectos extraños.
Pero si a usted le gusta, adelante… Ya sabe lo que tiene que hacer para retenerlo. Tiene una gran ventaja; nunca le faltará nada, es buen esposo, padre muy cariñoso y sumamente responsable. Será feliz si lo comprende, lo apoya y le perdona sus deslices.
El Hombre de Capricornio
No se le insinúe demasiado, porque no le gustan las mujeres coquetas, ama en ellas la naturalidad, la alegría y la honestidad. Le agrada que sean inteligentes para poder cambiar impresiones sobre política, historia y deportes. Adora la música, clásica y moderna, pero no le gusta bailar porque tiene la impresión de que es desgarbado y carece de gracia, lo que puede ser cierto por su propio cuerpo pesado, hecho más para el deporte que para otra cosa. Sin embargo, es muy posible que acceda a llevarla a bailar cuando ya esté muy enamorado de usted.
Interésese por lo que a él le gusta, anímelo con una sonrisa o un beso cuando lo vea triste, pídale consejos, deje que la tome del brazo al atravesar la calle y que le acerque la silla cuando va a sentarse. Es un caballero en toda la extensión de la palabra y le gusta que usted también lo considere así. Platíquele todo lo que hace, lo que piensa y a dónde y con quién va a salir cuando no pueda verlo a él, le caería muy mal enterarse por otros. Le gusta que le tengan confianza y que dependan de él. Si le pide que la acompañe al dentista porque le da miedo ir sola, se sentirá feliz de poder serle útil. De vez en cuando invítelo a cenar con la familia, así se dará cuenta de cómo se llevan entre ustedes; eso es muy importante para él. Tenga atenciones con sus parientes y no se le ocurra criticar a ninguno de ellos.
Si no ha terminado una carrera anímelo a recibirse, aunque usted tenga que esperarlo más tiempo. Sería una pena que por casarse dejara truncos sus estudios, ya que tiene, por su amplia concentración, una gran capacidad para aprender.
Por lo regular tiene buen carácter, pero si llega a enojarse téngale paciencia; sus enojos duran poco. Lo que se le dificulta es pedir perdón. Si no la llama es porque le da pena haber cedido a sus exabruptos. Haga como si no hubiera sucedido nada y trátelo igual que siempre.
Es un hombre sano, impetuoso, apasionado, fiel, incapaz de darle motivos para que deje de quererlo. Así como lo ve de seriezote, callado y a veces poco expresivo para demostrarle su amor, es uno de los seres más necesitados de cariño.
Y cuando lo conquiste, trátelo como a un rey, adivínele el pensamiento y téngalo contento. El sabrá compensarla dándole todo lo que necesita y guardándola por siempre en su corazón.
El Hombre de Aries
Tenga en cuenta que es voluntarioso y exige que le presten toda la atención del mundo y desea que lo atiendan al instante, ¡aunque claro está que no lo confesará abiertamente!.
La primera impresión que se tiene de él, es que se trata de un hombre encantador, noble, sincero y muy caballeroso. Está acostumbrado a deslumbrar a cualquier mujer con sus atenciones y su sonrisa infantil. Cuando se le escucha hablar, da la impresión de ser un señorón, con un talento increíble y una memoria prodigiosa… y en realidad es todo eso y más… pero su actitud está bien estudiada precisamente para eso: apantallar. No queremos restarle méritos, porque los tiene y son muchos, pero lo cierto es que él los hace más grandes, ya que sinceramente cree que nadie es más inteligente, culto y valioso que él. Si ese es el tipo de hombre que le gusta, ya lo encontró. Pero no se le rinda tan fácilmente… porque de inmediato perderá el interés. Hágase la interesante, escúchelo con atención, apláudale cuando lo amerite y dígale que lo admira. Hasta ahí todo va bien.
No se le aviente ni se le ocurra tomar iniciativas que no le correspondan. Deje que él sea quien muestre interés en verla de nueva y si la invita a salir al día siguiente, póngale un plazo mayor para despertar más su interés. No le sugiera a dónde ir y dele chance de que sea él quien decida: la llevará al sitio más elegante. Eso sí, procure ir lo mejor arreglada que pueda (sin exagerar), lo más femenina posible, discretamente maquillada y con un bonito perfume. Y mientras esté con él, no se le ocurra voltear a ver a nadie, pues lo tomaría como una ofensa. Cuando él busca compañía la quiere par a él solo. Desde luego, le advertimos que él tratará de intimar con usted, ya que posee un fuerte temperamento, es muy sensual y se enciende con gran facilidad. Si a las primeras de cambio acepta todo lo que él le propone, está perdida: una vez satisfechos sus deseos, si la vuelve a invitar será por sentirse un gran conquistador, pero jamás le propondrá matrimonio.
Tenga en cuenta que Marte les da el gusto por las batallas difíciles y Marte también es el erotismo simple y sin trascendencia. Mientras más luche por usted, más la tomará en cuenta. Si se enamora y finalmente logra pescarlo para que se case con usted, considérese muy afortunada, ya que se trata de un hombre responsable, trabajador y sumamente fiel a su familia. También tenemos que decirle que siente preferencia por las mujeres que, aparte de ser bonitas y atractivas, tengan cierta cultura y estén dispuestas en cualquier momento a seguirlo en sus aventura y exploraciones, a discutir con él sobre deportes, política o arte y, además, que sea estupenda cocinera, mejor administradora, enfermera, colaboradora eficiente en el trabajo, esposa comprensiva, cariñosa y una estupenda madre para sus hijos. Y si a eso le agrega que soportará con gusto a su madre, hermanos y amigos: mejor, que mejor. Esa es la receta para retener para siempre a su lado a ese atractivo hombre de Aries que usted eligió. Par no hacerse la de más emoción, y como remate, le diremos que tendría que sacrificar no sólo su libertad, sino también aquellas amistades que él no apruebe o autorice. A cambio de eso, él tratará de darle todo lo que necesite y algo más, si puede. Eso sí: él pertenece al tipo precavido y ahorrador, que es bastante escaso. Si le toca el despilfarrador, idealista y poco práctico… que dios le ayude.
No crea que es tan sencillo, ya que siempre hay una lista de mujeres entusiasmadas por él. Algunas por su simpatía, otras por su magnetismo tan especial y las demás, fascinadas por su mirada, su tierno apretón de manos y sus graciosos guiños de complicidad que suelen confundirlas, unas creerán que les cierra el ojo y las otras que ya lo atraparon por su belleza e inteligencia. En realidad, es bastante difícil complacerlo, pero si logra que de verdad se enamore de usted, tendrá a un hombre enamorado y fiel por mucho tiempo, si no es que para toda la vida. Si usted piensa que son celosos, tal vez usted lo sea más, porque no querrá perderlo. Además, la mujer puede cambiarlo por medio del amor y compartiendo con él los mismos ideales.
El Hombre de Sagitario
No le va a costar gran trabajo hacerlo, sobre todo si usted es guapa, tiene bonito cuerpo, se ríe de sus chistes y aguanta sus bromas, que no siempre son agradables. Si puede perdonarle sus gritos cuando se le sube la importancia a la cabeza, si se interesa por lo que a él le gusta y no pone peros para salir a divertirse con él, ya casi lo atrapó. No lo asuste pidiéndole que se case, porque se le desaparecerá por largo tiempo y después tendrá que ir a buscarlo –aunque esto también cuenta a su favor, ya que se creen lo máximo y lo ven muy natural.
Es sumamente tierno, cariñoso, encantador y, como le gusta presumir con usted, la llenará de regalos. Pero por favor no le crea cuando le jure que la amará toda la vida, pues en cuanto usted no lo vea, le lanzará piropos a otra mujer que le guste. Ni modo, la infidelidad la llevan en la sangre. En la carrera de leyes, donde también destacan, se dice que la especialidad en divorcios se hizo particularmente par a los Sagitarios y los Géminis, ya que se casan y descansan varias veces. Por eso no es aconsejable que se casen jóvenes; sus amores no son duraderos, a menos que se encuentren con la mujer ideal, que los trate como príncipes y además de bonitas sean muy inteligentes.
El Sagitario, aunque nazca en la pobreza, siempre encuentra la manera de subir y llegar a ocupar puestos importantes, y si se casa durante esa etapa, se desesperará de que su mujer no evolucione al mismo ritmo que él y a los pocos años ya se convirtieron en perfectos extraños.
Pero si a usted le gusta, adelante… Ya sabe lo que tiene que hacer para retenerlo. Tiene una gran ventaja; nunca le faltará nada, es buen esposo, padre muy cariñoso y sumamente responsable. Será feliz si lo comprende, lo apoya y le perdona sus deslices.
El Hombre de Capricornio
No se le insinúe demasiado, porque no le gustan las mujeres coquetas, ama en ellas la naturalidad, la alegría y la honestidad. Le agrada que sean inteligentes para poder cambiar impresiones sobre política, historia y deportes. Adora la música, clásica y moderna, pero no le gusta bailar porque tiene la impresión de que es desgarbado y carece de gracia, lo que puede ser cierto por su propio cuerpo pesado, hecho más para el deporte que para otra cosa. Sin embargo, es muy posible que acceda a llevarla a bailar cuando ya esté muy enamorado de usted.
Interésese por lo que a él le gusta, anímelo con una sonrisa o un beso cuando lo vea triste, pídale consejos, deje que la tome del brazo al atravesar la calle y que le acerque la silla cuando va a sentarse. Es un caballero en toda la extensión de la palabra y le gusta que usted también lo considere así. Platíquele todo lo que hace, lo que piensa y a dónde y con quién va a salir cuando no pueda verlo a él, le caería muy mal enterarse por otros. Le gusta que le tengan confianza y que dependan de él. Si le pide que la acompañe al dentista porque le da miedo ir sola, se sentirá feliz de poder serle útil. De vez en cuando invítelo a cenar con la familia, así se dará cuenta de cómo se llevan entre ustedes; eso es muy importante para él. Tenga atenciones con sus parientes y no se le ocurra criticar a ninguno de ellos.
Si no ha terminado una carrera anímelo a recibirse, aunque usted tenga que esperarlo más tiempo. Sería una pena que por casarse dejara truncos sus estudios, ya que tiene, por su amplia concentración, una gran capacidad para aprender.
Por lo regular tiene buen carácter, pero si llega a enojarse téngale paciencia; sus enojos duran poco. Lo que se le dificulta es pedir perdón. Si no la llama es porque le da pena haber cedido a sus exabruptos. Haga como si no hubiera sucedido nada y trátelo igual que siempre.
Es un hombre sano, impetuoso, apasionado, fiel, incapaz de darle motivos para que deje de quererlo. Así como lo ve de seriezote, callado y a veces poco expresivo para demostrarle su amor, es uno de los seres más necesitados de cariño.
Y cuando lo conquiste, trátelo como a un rey, adivínele el pensamiento y téngalo contento. El sabrá compensarla dándole todo lo que necesita y guardándola por siempre en su corazón.
El Hombre de Aries
Tenga en cuenta que es voluntarioso y exige que le presten toda la atención del mundo y desea que lo atiendan al instante, ¡aunque claro está que no lo confesará abiertamente!.
La primera impresión que se tiene de él, es que se trata de un hombre encantador, noble, sincero y muy caballeroso. Está acostumbrado a deslumbrar a cualquier mujer con sus atenciones y su sonrisa infantil. Cuando se le escucha hablar, da la impresión de ser un señorón, con un talento increíble y una memoria prodigiosa… y en realidad es todo eso y más… pero su actitud está bien estudiada precisamente para eso: apantallar. No queremos restarle méritos, porque los tiene y son muchos, pero lo cierto es que él los hace más grandes, ya que sinceramente cree que nadie es más inteligente, culto y valioso que él. Si ese es el tipo de hombre que le gusta, ya lo encontró. Pero no se le rinda tan fácilmente… porque de inmediato perderá el interés. Hágase la interesante, escúchelo con atención, apláudale cuando lo amerite y dígale que lo admira. Hasta ahí todo va bien.
No se le aviente ni se le ocurra tomar iniciativas que no le correspondan. Deje que él sea quien muestre interés en verla de nueva y si la invita a salir al día siguiente, póngale un plazo mayor para despertar más su interés. No le sugiera a dónde ir y dele chance de que sea él quien decida: la llevará al sitio más elegante. Eso sí, procure ir lo mejor arreglada que pueda (sin exagerar), lo más femenina posible, discretamente maquillada y con un bonito perfume. Y mientras esté con él, no se le ocurra voltear a ver a nadie, pues lo tomaría como una ofensa. Cuando él busca compañía la quiere par a él solo. Desde luego, le advertimos que él tratará de intimar con usted, ya que posee un fuerte temperamento, es muy sensual y se enciende con gran facilidad. Si a las primeras de cambio acepta todo lo que él le propone, está perdida: una vez satisfechos sus deseos, si la vuelve a invitar será por sentirse un gran conquistador, pero jamás le propondrá matrimonio.
Tenga en cuenta que Marte les da el gusto por las batallas difíciles y Marte también es el erotismo simple y sin trascendencia. Mientras más luche por usted, más la tomará en cuenta. Si se enamora y finalmente logra pescarlo para que se case con usted, considérese muy afortunada, ya que se trata de un hombre responsable, trabajador y sumamente fiel a su familia. También tenemos que decirle que siente preferencia por las mujeres que, aparte de ser bonitas y atractivas, tengan cierta cultura y estén dispuestas en cualquier momento a seguirlo en sus aventura y exploraciones, a discutir con él sobre deportes, política o arte y, además, que sea estupenda cocinera, mejor administradora, enfermera, colaboradora eficiente en el trabajo, esposa comprensiva, cariñosa y una estupenda madre para sus hijos. Y si a eso le agrega que soportará con gusto a su madre, hermanos y amigos: mejor, que mejor. Esa es la receta para retener para siempre a su lado a ese atractivo hombre de Aries que usted eligió. Par no hacerse la de más emoción, y como remate, le diremos que tendría que sacrificar no sólo su libertad, sino también aquellas amistades que él no apruebe o autorice. A cambio de eso, él tratará de darle todo lo que necesite y algo más, si puede. Eso sí: él pertenece al tipo precavido y ahorrador, que es bastante escaso. Si le toca el despilfarrador, idealista y poco práctico… que dios le ayude.