El As del Agua, el de las Emociones (As de Copas en el Tarot tradicional), se titula FLUIR. Podemos ver a una figura que se desplaza tranquilamente por el agua. No va contra la corriente sino que permite que la marea la mueva sin oponer la persona resistencias.

¿Cuántas veces te niegas al amor? ¿Cuántos obstáculos pones a la hora de dar y recibir expresiones de afecto? ¿Por qué fuerzas tanto tu corazón? El agua sabe cómo manejarse; no temas zambullirte en ella pues ya sabemos que las emociones son agua que debe ser liberada y nunca estancada. Se trata del agua en su naturaleza esencial, por tanto, ni sobreactuará ni se estancará si tú permites que fluya libremente. Los excesos no son la verdadera naturaleza de las emociones, sino que surgen por intentar controlarlos sin confiar en los verdaderos sentimientos.

Confía en el proceso de la vida; si somos hechos de amor, ¿por qué temer tanto a la propia naturaleza?

Estamos divididos. La esquizofrenia es una condición normal del ser humano, al menos ahora.
Quizás no era así en el mundo primitivo, pero siglos de condicionamiento, de civilizacion, de cultura y de religión han hecho del hombre una multitud: dividido, partido, contradictorio...
Sin embargo, debido a que esta division va contra su naturaleza, en lo profundo, oculta en alguna parte, la unidad todavía sobrevive.
Debido a que el alma del hombre es una, todos los condicionamientos destruyen a lo sumo la periferia del hombre.
Y el centro continua intocado. Gracias a esto el hombre continua viviendo..., pero su vida se ha convertido en un infierno.
Todo en esfuerzo del zen consiste en dejar de lado esta esquizofrenia, en abandonar esta personalidad dividida, en abandonar la mente dividida del hombre, en volverse uno, centrado, cristalizado.
Tal como eres no puedes decir que eres.
No tienes un ser. Eres como una plaza del mercado: hay muchas voces.
Si quieres decir "si", inmediatamente el "no" esta allí.
Ni siquiera puedes pronunciar una simple palabra, "si". de forma total...
De esta manera la felicidad no es posible, la infelicidad es la consecuencia natural de una personalidad dividida.

Comentario

La figura de esta carta da un nuevo giro a la vieja idea de quedarse atrapado entre la espada y la pared!.
Pero estamos precisamente en este tipo de situación cuando nos quedamos atrapados en el aspecto indeciso y dual de la mente.
¿Deberia soltar los brazos y caer de cabeza, o bien las piernas y caer de pie? ¿ Tendría que ir aquí o allí? ¿ Tendría que decir si o no?.
Sea cual sea la decisión tomada siempre nos preguntaremos si hubiera sido mejor de la otra forma.
La única forma de salir del dilema consiste, desafortunadamente, en soltarse de los dos extremos al mismo tiempo.
No puedes encontrar la salida de uno de ellos resolviéndolo, haciendo listas sobre los pros y los contras o, en cualquier caso, elaborando planes desde la mente.
Es mejor seguir a tu corazón, si puedes encontrarlo. Si no puedes, salta: ¡tu corazón empezara a latir tan rápido que no habrá equivocación respecto a donde se encuentra!.