Ay, chicas, al final me voy a poner yo a enviaros señales, eh, ja, ja, ja. Ahora en serio, Nube, en lugar de decirte lo que yo pienso al leerte te lo voy a poner en forma de pregunta no para que me respondas sino para que te respondas a ti, ¿no te parece que le das demasiada importancia al resto del mundo? ¿A lo que otros crean o piensen de ti? ¿A las energías de los otros? Mira, cuando yo empecé a leer el tarot tuve que aguantar muchas cosas, entre ellas que personas se rieran de mí cuando les hacía una predicción, que me llamaran y me consideraran ignorante, inculta, que pusieran mala cara al verme con mis cosas, y entre esa gente incluyo a personas de mi familia. Si me estás leyendo hoy aquí es porque no me importó nada todo lo que me pudieran decir, seguí mi camino, no me importó nada todo lo que tuviera que hacer para seguir adelante con lo que me dictaba el corazón y rechacé uno tras otro todos los juicios a los que me sometieron, me enfrenté a todas y cada una de las personas que me tuve que enfrentar, porque era mi vida, no la de ellos, y con la vida de uno, uno puede hacer lo que le dé la gana mientras no invada la vida de los demás, y deben respetarlo, y si no lo respetan es su problema.
No sé, me encantaría poder materializar vuestros mensajes, pero entiendo que esto es una cosa entre el universo, Dios, lo que sea en lo que creáis y vosotras, porque no importa cuanto pueda decir nadie, sea yo u otro, hay que experimentarlo personalmente, de otra manera poca validez tiene para uno. Voy a decir una cosa que creo firmemente, todos, absolutamente todos, no importa que se crea en ello o no, recibimos señales, pero hay veces en las que no las vemos, lo he comprobado en varias ocasiones con otras personas, les pasaban cosas alucinantes y ellas ni se enteraban. Y alguien dirá, ¿si son tan alucinantes como es que no se enteran? Un ejemplo muy gracioso, una persona va a un comercio, paga, la dependienta le dice que le ha dado X dinero de menos, la persona está segura de que no, pero le dice que cuando vuelva si ha hecho la caja y le falta que no tiene problema en dárselo, a pesar de que la dependienta le contesta de no muy buenas maneras cuando vuelve otro día le dicen que les falta el dinero y a pesar de que está segura de que le ha pagado lo que corresponde se lo da. Bien, yo le dije a la persona, no te preocupes, si el dinero es tuyo vuelve, no tengo ninguna duda de ello, no sé cómo, pero volverá. Pocos días después va a comprar a otro lugar y le hacen un descuento exactamente por el mismo importe que pagó en el otro lugar. A mí esto me parece una señal con luces de neón y la persona ni siquiera asoció una cosa con otra hasta que se lo dije. Y es que no es sólo eso, después de aquello estuvo una temporada que iba a comprar a los sitios y cuando llegaba a casa resultaba que a pesar de haber pasado por la caja toda la compra no le habían cobrado esto o aquello ja, ja, ja, estuvo así durante unas semanas. A lo mejor esto a otro le parece una tontería, para mí es algo muy significativo.
Y no doy más la vara, creo que lo mejor que puedo recomendar para las personas a las que no les resulten los experimentos es que lo intenten con los ejercicios de gratitud, creo, por lo que veo, que son más sencillos para empezar.
Deseo que a cada una de vosotras os llegue el mensaje que os tiene que llegar

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