(13-02-2025, 09:36 AM)Krispin escribió: Hola
Mi duda es lo que veo que les ha pasado a gente de mi alrededor e incluso a mí
Haces la misma pregunta a diferentes tarotistas,videntes,....en diferentes tiempos y todas te dicen lo mismo. Consultas que se hacen a gente que ya has consultado anteriormente o/y llevas años con ellas y que han acertado.Pasa el tiempo y no se da . Mi pregunta es porque no se da si te lo dicen distintas tarotistas?
Ej : quiero saber si me va a tocar la lotería. Respuesta : si dentro de dos meses..pasan los dos meses incluso 1 año y no se ha dado
Otro ejemplo: va a volver fulano conmigo? Respuesta: si en 6 meses, Han pasado años y no se ha dado
Google Maps Esotérico: El Tarot como Guía, no como Predicción Fija
Es fundamental entender que el tarot no debe ser utilizado como una herramienta para obtener respuestas exactas o predicciones fijas sobre el futuro. El tarot es una guía que permite reflexionar sobre las situaciones, explorar caminos y decisiones, pero no puede garantizar resultados específicos de manera inflexible.
Consultas repetidas sobre lo mismo:
Cuando un consultante repite las mismas preguntas una y otra vez sin que haya un cambio en la situación, se está generando una dependencia que va en contra del propósito del tarot. El objetivo no es buscar la misma respuesta constantemente, sino más bien encontrar la forma de actuar sobre lo que ya se ha revelado. Preguntar lo mismo no cambia el resultado, y la clave está en ver qué acciones pueden tomarse para avanzar.
Expectativas sobre respuestas definitivas:
Preguntar "¿me voy a ganar la lotería?" o "¿volverá mi ex?" refleja una idea equivocada del tarot. No es una herramienta para obtener certezas absolutas, sino una forma de explorar las posibilidades y ver qué caminos se presentan. En lugar de esperar pasivamente, el tarot puede ayudar a la persona a reflexionar sobre su propio papel en esas situaciones. La vida no se trata solo de esperar que sucedan cosas, sino de actuar en consecuencia.
El tarot no es exclusivamente predictivo:
El tarot no debe considerarse únicamente como un medio predictivo. Si bien puede mostrar tendencias, el verdadero valor está en la reflexión que proporciona. En lugar de preguntar si algo va a ocurrir, se puede indagar en cómo abordar una situación o cómo mejorar el bienestar personal mientras se espera una resolución. El tarot ofrece claridad para tomar decisiones, no para prever un futuro fijo.
Responsabilidad personal:
Finalmente, el tarot no debe sustituir la necesidad de asumir responsabilidad por la propia vida. Si alguien busca respuestas fuera de sí mismo sin hacer cambios en su comportamiento o decisiones, está eludiendo su propio poder personal. El tarot debe ser una herramienta que impulsa a la acción y la reflexión, no un medio para evitar tomar las riendas de la propia vida.
El peligro del pensamiento mágico:
Un peligro importante es que algunos consultantes, por su naturaleza proclive a las dependencias, pueden desarrollar un pensamiento mágico al recurrir al tarot de manera excesiva. Esto puede llevar a la creencia de que el futuro está determinado por fuerzas externas y que no es necesario hacer esfuerzos personales para cambiar la situación. Este tipo de mentalidad es peligrosa, ya que fomenta la inacción y la desconexión con la realidad, lo que impide que las personas tomen control de sus vidas y asuman la responsabilidad de su propio bienestar.
Ejemplo típico:
Un caso común es el de una persona que, en una consulta anterior, se le había dicho que había encontrado al "hombre de su vida". Pasado un tiempo, volvió a consultar: "¿Por qué ahora no quiere seguir conmigo?" Al abrir las cartas, se reveló una relación llena de celos, inseguridad y una convivencia tóxica. Ella controlaba todos los aspectos de la vida del chico, como el teléfono, porque sentía que le habían hecho mucho daño en el pasado. Finalmente, el chico se alejó, ya que no estaba dispuesto a vivir rodeado de tensiones constantes y calamidades. A pesar de que se le había dicho que era el "hombre de su vida", fue su propio comportamiento lo que lo alejó.
En este caso, la chica le reclamó a la tarotista: "¡Pero si
TÚ me dijiste que era el hombre de mi vida!" Y la tarotista respondió: "Sí, pero la que no sabe conservar relaciones eres tú. ¿Quién decidió tratarlo de ese modo?" La respuesta de la chica:
"¡Pero si es el hombre de mi vida, tiene que aguantarlo todo!"
Moraleja:
El tarot no es una solución mágica ni una excusa para justificar actitudes destructivas. Es una guía para reflexionar sobre las tendencias y caminos, pero la responsabilidad de las decisiones recae en la persona. El verdadero poder está en tomar las riendas de tu vida.
