" El ambiente es tenso, la atmósfera está cargada con sentimientos encontrados, el aire que se respira parece estar plagado de las dudas y miedos de los allí reunidos. Los familiares y amigos muestran su dolor por la inexorable partida de aquel que había compartido tantos momentos dichosos con ellos.
Nadie sabe qué decir, los sentimientos por la marcha del ser querido están teñidos por el miedo al olvido. Nadie quiere interferir. Sólo sus miradas expresan las emociones que están viviendo en esos instantes. El capta todas esas energías que tienen la doble virtud de empujarle hacia adelante, a emprender su viaje por un lado y a retenerle junto a sus seres queridos. Todos son conscientes de que cuando traspase el umbral estará en la otra vida. Todos saben lo que eso significa y por eso sus deseos son que el trance no sea doloroso. Aunque llevan tiempo preparándose para la separación, llegado el momento se dan cuenta de que es duro ver marchar a alguien.
Su espíritu, de pronto, se hunde en un oscuro túnel al final del cual brilla una intensísima luz. Se siente presionado, como si algo o alguien le empujara,. Un último esfuerzo y finalmente se zambulle en una luminosidad increíble que todo lo invade. La presión desaparece, el túnel, la opresión.., todo queda atrás. ¿Donde está?... ¿Qué ocurrirá ahora?... Se siente extraño en un entorno muy diferente al que estaba acostumbrado hasta ahora.
Tímidamente abre los ojos y mira alrededor y empieza a descubrir a su lado formas, rostros que se le acercan. Siente como le tocan, le acarician con sumo cuidado. Ve como unas caras familiares vienen a recibirle. Todos sonríen y se respira alegría y gozo. No hay duda, han venido a recibirle. El gran viaje ha terminado, ya ha llegado por fin a la otra vida:
Nadie sabe qué decir, los sentimientos por la marcha del ser querido están teñidos por el miedo al olvido. Nadie quiere interferir. Sólo sus miradas expresan las emociones que están viviendo en esos instantes. El capta todas esas energías que tienen la doble virtud de empujarle hacia adelante, a emprender su viaje por un lado y a retenerle junto a sus seres queridos. Todos son conscientes de que cuando traspase el umbral estará en la otra vida. Todos saben lo que eso significa y por eso sus deseos son que el trance no sea doloroso. Aunque llevan tiempo preparándose para la separación, llegado el momento se dan cuenta de que es duro ver marchar a alguien.
Su espíritu, de pronto, se hunde en un oscuro túnel al final del cual brilla una intensísima luz. Se siente presionado, como si algo o alguien le empujara,. Un último esfuerzo y finalmente se zambulle en una luminosidad increíble que todo lo invade. La presión desaparece, el túnel, la opresión.., todo queda atrás. ¿Donde está?... ¿Qué ocurrirá ahora?... Se siente extraño en un entorno muy diferente al que estaba acostumbrado hasta ahora.
Tímidamente abre los ojos y mira alrededor y empieza a descubrir a su lado formas, rostros que se le acercan. Siente como le tocan, le acarician con sumo cuidado. Ve como unas caras familiares vienen a recibirle. Todos sonríen y se respira alegría y gozo. No hay duda, han venido a recibirle. El gran viaje ha terminado, ya ha llegado por fin a la otra vida:
UN NIÑO ACABA DE NACER."