Para explicar el porqué funciona el Tarot primero debemos revisar el porqué los seres humanos podemos conectar energéticamente unos con otros. Esto, no desde la visión mágica y esotérica, sino desde los descubrimientos de la ciencia.
El bioelectromagnetismo ha confirmado que el cuerpo humano produce campos electromagnéticos que pueden, incluso, interactuar con el campo de otras personas u aparatos electrónicos. Producto del trabajo de estos campos electromagnéticos somos capaces de emitir “Radiación infrarroja” que es una onda electromagnética que producimos con nuestra temperatura corporal y cuya medición se hace a través de las Termografías. Desde esta perspectiva inicial, podemos imaginar nuestro cuerpo como un móvil o aparato electrónico gigante que emite ondas electromagnéticas [o irradia energía] y que envía constante información hacia el exterior, que a su vez interactua con los campos electromagnéticos de otras personas, reproduciendo así un traspaso constante de energía y variables de información entre nosotros.
Los científicos han descubierto que se puede estudiar el comportamiento de un cuerpo material según su fluctuación electromagnética, es decir, midiendo su comportamiento energético y analizando el tipo de radiación que emite. De la misma forma es posible medir la naturaleza del sonido [otro tipo de onda] revisando su frecuencia. Entonces, es razonable pensar que el intercambio energético entre personas existe y que nuestra mente está capacitada, tal como lo está un Termógrafo o un Sonómetro, para descifrar información y variables de otro ser humano.
Visto así, podemos observar una Sesión de Tarot como un intercambio de señales electromagnéticas entre consultante y Tarotista, como si fueran dos móviles enormes intercambiando información invisible [ondas electromagnéticas y sonido], lo que unido al trabajo de interpretación simbólica del Tarot permite expandir la percepción sensorial de ambos, permitiendo así abrir un campo de información adicional, como si los dos móviles estuvieran sumando sus chips y circuitos para resolver las preguntas que aparezcan. La baraja de cartas en sí, vendría a ser el protocolo o lenguaje común que tiene por objetivo transformar la energía, datos y variables intercambiados en información traducida como aspectos cotidianos de la vida y que se reflejan en las figuras arquetípicas del Tarot.
Puede sonar a ficción, pero no lo es si observamos el contexto científico que existe detrás y la validación que se ha hecho respecto al intercambio energético versus la interacción electromagnética entre seres humanos. Lo realmente curioso y que si parece ficción es el hecho de que nadie en la escuela nos haya capacitado para comprender en profundidad la naturaleza electromagnética de nuestros cuerpos, justamente cuando somos grandes emisores de ondas sonoras y electromagnéticas que están constantemente enviando información hacia el exterior. Esta sería una capacitación fundamental que explicaría, en gran parte, los fenómenos de percepción extrasensorial y el traspaso de energía e información catalogado por el mundo esotérico como Telepatía, entre otras habilidades humanas. Una información que esclarecería, además, el funcionamiento y mecánica del Tarot.
Origen de la información: https://www.facebook.com/AquarianTarot
Aquí abajo: Imagen de una Termografía. Un ejemplo de cómo nuestro cuerpo puede hablar y enviar información hacia los demás en forma de energía y datos cuantificables.
![[Imagen: 10pcy85.jpg]](http://i61.tinypic.com/10pcy85.jpg)
El bioelectromagnetismo ha confirmado que el cuerpo humano produce campos electromagnéticos que pueden, incluso, interactuar con el campo de otras personas u aparatos electrónicos. Producto del trabajo de estos campos electromagnéticos somos capaces de emitir “Radiación infrarroja” que es una onda electromagnética que producimos con nuestra temperatura corporal y cuya medición se hace a través de las Termografías. Desde esta perspectiva inicial, podemos imaginar nuestro cuerpo como un móvil o aparato electrónico gigante que emite ondas electromagnéticas [o irradia energía] y que envía constante información hacia el exterior, que a su vez interactua con los campos electromagnéticos de otras personas, reproduciendo así un traspaso constante de energía y variables de información entre nosotros.
Los científicos han descubierto que se puede estudiar el comportamiento de un cuerpo material según su fluctuación electromagnética, es decir, midiendo su comportamiento energético y analizando el tipo de radiación que emite. De la misma forma es posible medir la naturaleza del sonido [otro tipo de onda] revisando su frecuencia. Entonces, es razonable pensar que el intercambio energético entre personas existe y que nuestra mente está capacitada, tal como lo está un Termógrafo o un Sonómetro, para descifrar información y variables de otro ser humano.
Visto así, podemos observar una Sesión de Tarot como un intercambio de señales electromagnéticas entre consultante y Tarotista, como si fueran dos móviles enormes intercambiando información invisible [ondas electromagnéticas y sonido], lo que unido al trabajo de interpretación simbólica del Tarot permite expandir la percepción sensorial de ambos, permitiendo así abrir un campo de información adicional, como si los dos móviles estuvieran sumando sus chips y circuitos para resolver las preguntas que aparezcan. La baraja de cartas en sí, vendría a ser el protocolo o lenguaje común que tiene por objetivo transformar la energía, datos y variables intercambiados en información traducida como aspectos cotidianos de la vida y que se reflejan en las figuras arquetípicas del Tarot.
Puede sonar a ficción, pero no lo es si observamos el contexto científico que existe detrás y la validación que se ha hecho respecto al intercambio energético versus la interacción electromagnética entre seres humanos. Lo realmente curioso y que si parece ficción es el hecho de que nadie en la escuela nos haya capacitado para comprender en profundidad la naturaleza electromagnética de nuestros cuerpos, justamente cuando somos grandes emisores de ondas sonoras y electromagnéticas que están constantemente enviando información hacia el exterior. Esta sería una capacitación fundamental que explicaría, en gran parte, los fenómenos de percepción extrasensorial y el traspaso de energía e información catalogado por el mundo esotérico como Telepatía, entre otras habilidades humanas. Una información que esclarecería, además, el funcionamiento y mecánica del Tarot.
Origen de la información: https://www.facebook.com/AquarianTarot
Aquí abajo: Imagen de una Termografía. Un ejemplo de cómo nuestro cuerpo puede hablar y enviar información hacia los demás en forma de energía y datos cuantificables.
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